En ese vuelo viajó su padre, Paolo, que regresa así a casa al cuentro de su esposa, Rossella, y su hija Martina. Le ha acompañado en ese triste viaje Valentino Rossi, amigo del alma de Super Sic e involuntariamente involucrado en el fatal accidente junto a Edwards, que ya ha regresado a su casa en Estados Unidos "muy triste por la pérdida de un amigo y de semejante manera".
Numerosos aficionados se han acercado hasta el aeropuerto de Roma a recibir a su héroe, rindiéndole tributo al grito de "Gladiator". El siguiente traslado ya es por carretera, más al norte de Italia, en dirección a su pueblo, Coriano, en la provincia de Rimini, en la región de Cattolica, a escasos kilómetros del circuito de Misano Adriático.
Fuente: AS
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