Terol y Bradl, todo a favor para ser campeones de 125 y Moto2

Salvo catástrofe o imprevisto, Nico Terol y Stefan Bradl se coronarán campeones de 125 cc y Moto2 en el GP de la Comunitat Valenciana

La última vez que el circuito de Cheste decidió dos títulos mundiales fue en 2006, hace cinco años. Entonces, las coronas fueron para Jorge Lorenzo (250 cc) y Nicky Hayden (MotoGP). El estadounidense protagonizó la sorpresa al desbancar al gran favorito, Valentino Rossi, del primer puesto de la clasificación. La incertidumbre es normal en este deporte, en el que nadie, nunca, puede dar nada por sentado hasta el final. El domingo Nico Terol y Stefan Bradl saldrán a la pista dispuestos a sentenciar sus respectivos títulos de 125 cc y Moto2. El de Alcoy tendrá el plus añadido de correr en casa, ante su afición, mientras que el alemán puede ser campeón incluso antes de iniciar la carrera, si como todo indica Marc Márquez arroja la toalla por culpa de sus problemas físicos.

Terol, que posee 20 puntos de renta sobre el francés Johann Zarco, ya desperdició un clarísimo 'match ball' hace dos semanas en Malasia. Ayer llegó al Ricardo Tormo con la lección aprendida: “Las cosas que cuestan saben mejor. Reconozco que me sorprendió el ritmo de Zarco en Sepang... quizá debí tirar las primeras vueltas y luego situarme detrás de él para intentar pasarlo en la recta, al final. Esta vez no saldré a ganar sino a rematar el trabajo de todo el año”, aseguró, sereno, el piloto de Aspar.

La temporada pasada también afrontó el último gran premio del calendario con opciones matemáticas, pero era Marc Márquez el que llevaba ventaja y supo dosificarla: “He visto la carrera del pasado año para fijarme en lo que hizo Marc, en su planteamiento, que ahora es mi referencia puesto que ahora soy el que lo tiene todo a favor”. La procesión va por dentro. Es evidente que Nico no se fía de Zarco: “Desde Montmeló sabía que él sería un rival hasta el final, es muy rápido y ha sido muy regular, ha puntuado en todas las carreras, así que no puedo estar tranquilo con Zarco pisándome los talones”.

Bradl lo tiene aún mejor sobre el papel. Después de que Márquez llegara a remontarle 82 puntos en el punto álgido de la temporada, el alemán vio como su rival, perseguido por las lesiones y el infortunio, se veía obligado a perderse la carrera de Malasia, dejando vía libre a la primera corona de Bradl en Moto2. El piloto del Kieffer Racing sería campeón incluso si Marc saliese a correr, ganara en Valencia y él no terminara más abajo de la decimocuarta posición. Líder indiscutible en la primera fase de la temporada, el hijo del subcampeón mundial Helmut Bradl está a punto de conseguir la recompensa a su mejor cualidad: la regularidad. Aunque para muchos, Márquez será el campeón moral.

Fuente: Sport